55 3754 7236 | 55 1755 3492

  • Blog- Excellence Capacitación Ejecutiva

    Blog

Blog

Conserva tu Empleo

Ante la situación económica evidente que vivimos hoy en día, se hace necesario reducir gastos y ahorrar en todo lo posible, dentro de las organizaciones no es la excepción.

Las empresas se encuentran en un momento crítico en el cual se requiere hacer más con menos; es decir, el cuidado de los recursos, sobre todo financieros, se hace indispensable, evitar derroches, incrementar la productividad, triplicar esfuerzos comerciales, establecer más y mejores estrategias, ser más creativos y medir los resultados, así como evaluar el desempeño del personal con un único fin: subsistir y permanecer ante ésta «crisis» que en realidad significa «crecimiento».

Todo lo anterior conlleva a la toma de decisiones, en ocasiones, con resistencia pero necesarias sobre recortes de personal, ya sean masivos o bien paulatinos con el fin de aligerar la carga nominal, fiscal y económica en la que hoy se encuentra inmersa la fuerza empresarial Mexicana.

No solamente las pequeñas y medianas empresas se ven en esta situación. En mayor o menor medida, toda la industria tanto de productos y servicios a nivel internacional está padeciendo esta vulnerabilidad.

Estas líneas no pretenden alarmar, ni generar preocupaciones adicionales ya que sin duda la crisis económica ha tocado fondo y se recuperará en el mediano y largo plazo para dar apertura a nuevas oportunidades para aquellos que estén preparados para aprovecharlas.

Sin embargo, estos párrafos, sí tienen el objetivo de orientarte en tu desempeño laboral. Si tienes un empleo actualmente, la recomendación es: «cuídalo» a continuación te proporciono algunas recomendaciones que, si las llevas a la práctica, evitarás ser considerado (en la medida de lo posible y con el empeño que pongas) candidato a despido.

Cuales son los factores que las empresas toman en cuenta para despedir a un empleado:

♦ Productividad

♦ Rentabilidad

♦ Resultados

♦ Actitud

♦ Antigüedad

♦ Nivel salarial

Una organización difícilmente pensará en deshacerse de un buen elemento, de un empleado que le produce resultados, que le genera rentabilidad, que cumple sus objetivos y además mantiene una actitud positiva y proactiva tanto a sus labores como a las variantes del cambio.

Ante una reestructura o reingeniería empresarial, la mayoría de las ocasiones la toma de decisiones se basa en «quién sobra por cada área», «quién no justifica su puesto dentro de la empresa», «quién tiene salarios más altos y no son productivos», «qué área no es indispensable para la empresa…al menos por ahora», » qué ejecutivo genera conflictos y puede ser sustituido por alguien con menor salario o bien por otro empleado» y «qué empleados me cuestan más y me aportan menos», sumando a esto un factor muy común y lamentable, «quién tiene más antigüedad y me generará pensiones y gastos en el corto o mediano plazo».

Si bien es cierto que la cultura organizacional en cuanto a la toma de decisiones es cada vez distinta gracias a la asesoría de especialistas y consultores que apoyan a las empresas en este proceso, aún existen estos lineamientos en muchas compañías.

Te aseguro que lo que menos desea toda organización es deshacerse de su capital humano-intelectual, esto también le cuesta y afecta económicamente, ya que se va gente que conoce su negocio, su industria, personal a quien le costó capacitar y habilitar para desempeñar las funciones para las cuales fue contratado, fácil no es, lamentablemente sí necesario para continuar siendo fuente de empleo y competitiva en el mercado.

De tal forma que no te lo tomes personal, comprendiendo este contexto, tu empresa no es responsable de la situación económica mundial y sin temor a equivocarme está en busca de continuar operando a pesar de todo, así como procurando afectar lo menos posible a sus empleados.

Es tiempo de cambios y tú estas dentro del mismo, por lo que la sugerencia es que te ocupes.

¿Cómo?

Conserva tu empleo, no te inquietes por la incertidumbre, si compañeros tuyos ya fueron despedidos, siéntete afortunado de continuar, no vivas con la mente ocupada en que serás el siguiente, es mejor que:

♦ Desempeñes tu trabajo con calidad en tiempo y forma

♦ Aportes ideas para tu área y organización

♦ Muestra interés común, no sólo en tus intereses

♦ Reinvéntate día con día para ser más competitivo

♦ Sé el mejor en lo que haces

♦ Haz notar tus talentos ejerciéndolos

♦ Cumple con todos tus deberes y aporta más sin que te lo pidan

♦ Manten una actitud positiva, incluso ante todo cambio que se presente en tu empresa

♦ Sé proactivo

♦ Involucra a tus compañeros de trabajo en apoyar a su empresa y dar lo mejor de sí

♦ Sé generador de cambio, si cambias tú, cambia tu entorno

♦ Sé puntual y llega a tu puesto de trabajo a hacer lo que debes

♦ No asistas a trabajar para cumplir un horario, asiste a cumplir un propósito y un objetivo

♦ No pierdas tiempo, en las empresas tiempo es dinero, optimiza tu día con base en resultados sustentables

♦ Evita contagiarte de pesimismos

♦ No te prestes al «radiopasillo» los rumores solo son eso «rumores»

♦ Pregunta a tu jefe, cómo puedes ser mejor, pide retroalimentación de qué espera ahora de ti y cómo puedes apoyar a la organización

♦ Trabaja más y mejor, te aseguro que las ventajas que tendrás serán en beneficio tuyo en algún momento

♦ No te limites, los límites son mentales, tu potencial es mayor al que tú mismo crees

♦ Pon en acción tu creatividad

♦ Sé altamente productivo, eficaz y rentable para tu empresa. Tú sabes cómo hacerlo

♦ Haz que las cosas sucedan, lleva la planeación a la acción

♦ Asiste cada día a tu trabajo como si fuera el primero:

¿Recuerdas ese entusiasmo de tu primer día de trabajo?, la actitud que mostrabas en las primeras semanas, lo importante que era para ti hacer notar que fuiste bien elegido, lo presentable que asistías, el interés por aprender y aportar, eso es lo que te recomiendo que hagas y sientas a diario.

Con ello, tú te sentirás muy bien y tus superiores lo notarán, siempre y cuando sea auténtico y sincero de tu parte.

Además, ayuda a tu empresa a ahorrar:

♦ No derroches los suministros que tu organización te brinda para desempeñar tu trabajo

♦ Apaga luces que no requieras

♦ Recicla papel y todo lo posible que te sea útil para reutilizar

♦ Cuida tus instalaciones

♦ Dale uso correcto a todo el equipo de cómputo y electrónico de tu empresa

♦ Usa el teléfono sólo para asuntos de trabajo, no personales

♦ Súmate a todo esfuerzo de ahorro que tu empresa requiera

En general el objetivo es reducir gastos, incluyéndote, no seas un gasto, conviértete en una inversión para tu compañía.

Nadie mejor que tú conoce cómo ahorrar en tu puesto de trabajo, hazlo, no esperando que se te reconozca porque tal vez eso no suceda, pero sí por ti, por el simple hecho de coadyuvar y ser solidario con la empresa que creyó en ti al contratarte, hoy más que nunca te necesita y si esto lo hacen más y más personas los resultados serán sumamente favorables.

Es importante destacar que éstas recomendaciones son con el fin de conservar tu empleo y convertirte en un empleado excepcional, no pidas nada a cambio, el objetivo es evitar convertirte en parte de las estadísticas del desempleo actual, recuerda que todo esfuerzo tiene su recompensa, no lo hagas pensando en algo adicional a lo que hoy tienes, no por ahora, ejecuta tu plan de acción personal por y para ti, lo demás vendrá por añadidura, y por supuesto, si en ese plan puedes incluír a más compañeros de trabajo que se sumen te dejará una gran satisfacción.

Deseo sinceramente que éstos textos te sean de utilidad y te aporten ideas útiles para tu desempeño laboral.

Finalmente me permito reiterar, No te Preocupes, Ocúpate.

«Quien hace lo que ama, está condenado al éxito»

F. Cabral

EL PRESENTE ARTÍCULO, TÍTULO Y CONTENIDO SE ENCUENTRA PROTEGIDO CON DERECHOS DE PROPIEDAD INTELECTUAL Y DERECHOS DE AUTOR. DERECHOS RESERVADOS A FAVOR DE EXCELLENCE CAPACITACIÓN EJECUTIVA, S.C., (C). PROHIBIDA LA DISTRIBUCIÓN, O REPRODUCCIÓN TOTAL O PARCIAL DEL CONTENIDO SIN LA PREVIA AUTORIZACIÓN POR ESCRITO DE SU TITULAR.